Usos
El
metal puro es más resistente que el platino al
ataque de los ácidos, incluso al agua regia.
Se usa en aleaciones
con el platino y el paladio
para darles mayor dureza. Estas aleaciones se emplean
en la fabricación de contactos eléctricos
de resistencia elevada, en odontología, plumillas
para escribir, joyas, ejes y pivotes antimagnéticos
para relojes e instrumentos de precisión y restauraciones
metálizas sobre porcelana.
La aleación
rutenio-molibdeno es superconductora a temperaturas del
orden de -263ºC.
|